El pasado 20 de Junio los Smokin’ Lovin’ Machine celebraron su décimo aniversario rodeados de amigos en el Gruta 77. Fue una fiesta llena de ritmo en la que el público no se cansó de corear y bailar y los Smokin’ nos lo agradecieron dándonos más y más de su amalgama garage/rock/blues/funk/y miles-miles de cosas más. Nos avisaron de que habían venido a destrozar nuestras caderas y cumplieron con creces su objetivo. Después de esta noche podemos decir que ahora sabemos cuál es “la revelación mística de los reyes del Rock and Roll”.
Al grito de “All right baby” Bernie (voz y guitarra) daba por comenzado el concierto/celebración de décimo aniv
ersario de los Smokin’ Lovin’ Machine. Sonaba “Any Way” mientras el público iba calentando motores y empezaba a bailar. Los Smokin’ lucían sus mejores galas, gafas de sol incluídas, para darlo todo en esta noche tan especial.
No faltaron cánticos, gritos, ni por supuesto bailes. Los Smokin’ nos mantuvieron en la cresta de la ola del buen rollo con una buen surtido de temas llenos de ritmo y buenas melodías. Tuvimos momentos setenteros en “Candy Cane”, rollo surfero en “Confussion” y un poco de funk en “I can’t make a mistake”. Un crisol de influencias en el que no faltaron buenos solos de mano de Bernie y Dani (guitarra), el pulso ágil de Mati (bajo) y el preciso ritmo de Sergio (batería)
Escuchamos algunos de sus temas insignia como “Come back home” o “Shake it baby”, con los que el público no paró de corear y bailar a los pies de los Smokin’. Definitivamente, si de algo saben estos chicos es de animar al personal, así que no es de extrañar que la sala hirviera con cabezas que subían y bajaban continuamente. Se iba acabando el primer bloque del concierto y los chicos lo cerraron al ritmo de “Waiting for a song”, en la que los breaks de Sergio nos pararon el corazón antes de meterle caña al tema y acabar por todo lo alto.