NAT SIMONS PRESENTA “LIGHTS”

Nat Simons, compositora madrileña, ha presentado su segundo trabajo “Lights” compuesto por 10 temas que mezclan folk, blues, rock, y pop en la sala The Secret Social Club, en su ciudad natal.
Patricia Ripple y Javier Aguilar

Al llegar nos encontramos un público de mediana edad bastante numeroso, lo cual sorprende casi tanto como el despliegue de músicos e instrumentos  sobre el escenario. Aparte de las guitarras, bajo, batería, y teclados pertinentes, el uso de banjo y slide le dan un toque aún más americano al show que se nos presenta.

Comienza el concierto y notamos un sonido muy equilibrado, todo suena genial. Tanto voz, y segunda voz (interpretada por la hermana de la frontman, Elena) suenan en primer plano, lo cual se agradece para la gente que no nos sabemos de memoria las canciones. Parece que somos minoría, pues el público, formado por fans acérrimos, termina cada tema con un gran aplauso y ovación, lo cual crece a medida que pasa la noche.

Las potentes guitarras hacen que en el segundo tema, más cañero, provoque que la gente se vuelque y comiencen los bailes de una noche que no acaba sino de empezar.

Las canciones, si bien de personalidad y estilo tranquilas, tienen esa potencia, ese “no sé qué” que hace que uno tenga que moverse inevitablemente para bailar, es lo que ocurrió con “People“. Con mas calma, embobados, admirábamos la delicadeza a la hora de interpretar “Happiness“, “Endless Summer Road” o la sexy “Desire“.

Nat Simons estuvo mas brillante (si cabe) cuando se quedó sola sin sus músicos sobre el escenario y empezó a entonar en castellano la soberbia canción de Quique González “Piedras y flores“. Fue tal la sorpresa, que se podía advertir en las caras de la gente la fascinación y el embobamiento
ante tal maravilla.

Finalizando su magnífico show, en “Ain’t no blues” percibimos un guiño a su inspiración particular, su “muso” Bob Dylan; un tema que envolvió toda la
sala y nos llenó de nostalgia y felicidad mientras cantaba y tocaba la armónica.

No hay duda de que Nat Simons ha estado ausente mucho tiempo pero ha vuelto con un disco más que notable bajo el brazo con el que solo acaba de arrancar un gran viaje americano, que sin duda, recomendamos encarecidamente ver en directo.