Los asturianos Staytons han venido a conquistar Madrid y lo han hecho con la potencia de un álbum que está revolucionando todos los escenarios. Teníamos ganas de volver a escuchar “Singularity” en directo y no podiamos faltar a la cita.
Bárbara Téllez (@BbEmergentes)
Los Staytons visitaban Madrid y eso no podía perdérmelo. Los conocí casi de rebote en Metrópoli y aquello dio pie a una fantástica entrevista y a acompañarlos como El Enemigo en Sonorama. Tuve oportunidad de conocerlos un poco y de aprender en qué fijarme para disfrutar aún más sus conciertos. Y vaya si los disfruto.
Nos citaron en Costello y me planté allí prontísimo como una novata. Lo bueno fue que tuve oportunidad de ver cómo se iba llenando la sala y cómo la gente de la cola avisaba a sus incautos amigos sobre lo que se iban a encontrar. Da gusto ver que una banda de fuera de Madrid va haciendo público en la ciudad. Da gusto ver que hay bandas que lo hacen con un único LP en el mercado. Empezando así vete tú a saber qué decimos en un par de años.
Los jovencísimos Staytons hacen gala de una madurez que se traduce en un directazo. Intercalan con aplomo la fiereza sudorosa del Rock and Roll con la intimidad de unas melodías que conquistan. Suenan a moderno y a clásico. Son, definitivamente, singulares.
Intercalan con aplomo la fiereza sudorosa del Rock and Roll con la intimidad de unas melodías que conquistan.
Se subieron al escenario de la Costello en modo jam y nos prepararon para lo que estaba por venir. Abrieron oficialmente con el rollazo de “A good tempered men” y desplegaron las alas de “Singularity. ” Repasaron el álbum al completo, no sin aprovechar el viaje para dejarnos alguna novedad en el repertorio. Sería mitad del concierto cuando “Dancing in the moonlight” y “Holly” hicieron las delicias de los más curiosos. Ya advertimos que van a dar que hablar.
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- Staytons – Costello
De ahí en adelante todo fue energía y descontrol. La potente base de Rock and Roll de los Staytons sostuvo una fiesta de solos de guitarra y voces aulladas al cielo. Todo intercalado de esas intensas intervenciones de trompeta y sinte que dan el toque de magia a esta banda asturiana.
Disfrutamos de temas que no podían faltar en una noche así: Desde el insigne “Singularity” al enérgico “I think I’m going to buy a boat”, los Staytons nos dejaron un final de concierto que quitó el hipo. Lo dicho: Si tienes oportunidad de ver a Staytons en directo ponte tu ropa más cómoda y prepárate para una buena ducha de energía. Lo vas a gozar.
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