León Benavente
Con “La ribera” alcanzamos el cielo. Ese desfase, esa mirada de Abraham Boba… Fue una locura envuelta en cortinas doradas. Íntima como un teatro y beligerante, como León Benavente. Fuimos brigada con ellos y gritamos su nombre en bucle. No dejaron ni un alma en calma y ni un alma se quedó con nada dentro. Lo echamos todo fuera. Qué grandes.
