Xoel López dice que “Si mi rayo te alcanzara” es un conjunto de destellos, de momentos que te llevan a estados emocionales. Su directo es igual. Destellos de este nuevo repertorio y de la historia que lo trajo hasta aquí.
🖋️y 📸: Bárbara Téllez (@BbEmergentes)
Empecemos confesando cosas. Fui a ver a Xoel en las dos fechas del Botánico. Con esta información ya sabes que me gusta mucho. Si me conoces a mí, también sabes que hablo mucho. Pues tenemos un problema. La crónica de Xoel ha salido tremendamente larga y la voy a publicar sola.
¿Por qué te cuento esto? Porque el día que fui de prensa el telonero fue Pablo Lesuit y voy a enlazar su crónica aquí. Gracias por leer mis impresiones de Xoel, pero échale un vistazo a Pablo, que mola muchísimo.
Xoel López
Xoel López ha tocado dos veces en el Botánico este año. Tocó en La Riviera y en el Price el verano pasado. Fui a verlo las 4 veces. ¿Por qué? No es que me guste (que me gusta). Es que Xoel como persona y Xoel como proyecto tienen algo que me conecta y me da calma. Son las canciones, sí, pero no es sólo eso. Es también su forma de entender el directo y de entender la banda.
No soy capaz de ser breve, lo siento. Hay tanto que quiero escribir… Hay tanto puto amor en un concierto de Xoel López que dejar algo fuera me parece una falta de respeto. Son 9 músicos increíbles sobre el escenario y, sin embargo, el concierto ni rebosa ni satura.
Esta banda vacía las canciones para llenar el mensaje. Es elegante y humilde. Porque a veces vale más una nota vibrando en tí y contigo que una instrumentación artificiosa. Es algo que dice mucho de la calidad de las personas que se miran a los ojos y dejan hueco para darle a la canción el espacio que merece.
Me estoy pasando de emocional. Vamos al lío.
Xoel López en Noches del Botánico
Lo mejor (como lo que me apasiona de la música): todo. Los juegos de pies de Xoel acariciando el suelo. La coreografía de músicos que se unen en semicírculo para cantar “A serea o mariñeiro” y se retiran para dejar que brillen los duetos. Las voces armonizadas, las manos lejos del piano y entregadas a un shaker…
Un concierto de Xoel López es algo orgánico. Esos momentos de voces y percusiones son tan corporales, tan físicos, que tienen casi un aire tribal. Incluso el teclado recuerda a vibráfonos y xilófonos que te piden seguir el ritmo con las manos sobre las piernas. De alguna manera, esto invita a que todos los presentes participáramos en lo que estaba pasando.
Todo el botánico se mecía y cantaba. Vi abrazos y besos en los versos que cada uno usamos como si los hubieran escrito para nosotros.
El público se cantó el concierto desde principio hasta el final. De “La espina de la flor en tu costado” a “Patagonia”. De la fiesta tropical gracelandiana de “Tigre de bengala” a la llamada gallega de “Tierra”. Se paró el tiempo en “Joana” y apenas me atreví a respirar.
Un directo de Xoel López es una fiesta de contrastes y de emociones. Qué forma de alternar fluir con golpear. Mecer con bailar. Estar y soñar.
Duetos
Casi se cae la grada cuando Alice Wonder salió a cantar “Pez globo”. Qué voz y qué rollo tiene. Enlanzaron con “Cometa” y ella saltaba por el escenario, de lado a lado. Saltó por todos los que no pudimos, pero que también celebrábamos que somos amplias, serenas y vivas.
Poco después, Ede acompañaba a Xoel en “Alma de oro” para hablar de buscar lo auténtico. Terminaron abrazados como en el vídeo inspirado en “Don’t give up” de Peter Gabriel. Ya he soltado el dato, ahora dejadme que piense en este año aséptico y frío. En el abrazo que todos necesitamos. En apoyar la cara en el pecho de Xoel y rodear con los brazos la cintura de Ede. Qué importante es el contacto humano, piel con piel. Qué falta hace recordar que no estamos solos.
Por si acaso no teníamos la lagrimilla fuera, Ede se cantó “Quemas”. Sólo apunté 3 palabras: Desnuda, descarnada y herida. No tengo más que añadir.
Entre dueto y dueto nos echamos unos bailes, tenéis que saberlo. Pero Xoel nos tenía preparado otro puñal de plata directo al corazón y anunciaba a Teyou para cantar “Catarata”. Vaya maravilla.
Banda
No os hablo más de los duetos porque me parece feo contar cosas de los solos y no hablar de los demás miembros de la banda. ¡Pero qué banda! Adrián Seijas, Charlie Bautista, Fernando Lamas, Adrian Bartol y María Yfeu. Pido perdón a todos. Por no hablar de vosotros y por no dedicaros ni una triste foto. Las luces de los conciertos de Xoel López nunca son fáciles. Técnico de luces, por favor, acuérdate de los fotógrafos. Sólo tenemos 3 canciones y queremos rendir homenaje a todos los músicos.
Qué raro acabar una crónica pidiendo cosas, ¿eh? Puestos a pedir, voy a pediros a todos los que estéis leyendo esto que vayáis a ver a esta banda en directo. Y, si ya los habéis visto, os voy a pedir que nos lo contéis en los comentarios del post. Que compartamos dónde sentimos la magia igual que compartimos las canciones cantando juntos.